Interpretación
del cuestionario

Los resultados y gráficos que se acaban de generar proceden de tus respuestas a las cuestiones anteriores e intentan evaluar cómo funcionan las personas en los ambientes que frecuentan. La interpretación de los resultados se basa en la Teoría de Personalidad de Theodore Millon.

Este autor evalúa y enmarca a la personalidad normal (estilo de personalidad) en tres grandes áreas:

  1. Metas Motivacionales o motivos profundos que orientan a las personas,
  2. Estilos Cognitivos o modos de procesar la información del entorno o de uno mismo,
  3. Relaciones Interpersonales o forma en que las personas se relacionan o negocian con los demás en los círculos en los que se mueven.

A su vez, dentro de estas grandes áreas, encontramos escalas “bipolares” que se miden como escalas separadas, por lo que puntuar bajo en alguna de ellas, no significaría necesariamente tender al polo opuesto. 

Motivación

POSITIVISMO: Grado en el que se percibe el entorno de manera constructiva y optimista. Las personas positivas suelen confiar en sí mismas, encontrar oportunidades en todo momento y centrarse en las soluciones. Tienden a ser responsables, generosas y constantes con sus objetivos. Las emociones relacionadas son: alegría, interés, orgullo y gratitud, entre muchas otras.

NEGATIVISMO:  Grado en el que las personas se suelen encontrar mal o a disgusto con ellas mismas y provocar malestar y rechazo en los demás de manera inconsciente. En la mayor parte de las ocasiones interpretan y acrecientan el lado negativo de sus experiencias, muestran un estado de ánimo irascible y tienden a ser miedosos, huidizos y pasivos. Las emociones relacionadas son: frustración, soledad, ansiedad, enojo, incertidumbre y miedo.

ACTIVO: Grado en el que una persona es ágil y funcional, capaz de enfrentar las tareas rutinarias y valerse por sí misma de forma independiente y efectiva. Son personas conscientes de sus potencialidades y debilidades, plantean los problemas como oportunidades, gestionan de manera positiva sus emociones y se adaptan fácilmente a los cambios.

PASIVO: Grado en el que una persona permite actuar a los demás, no soliendo hacer las cosas por sí mismo. Tendencia a quedarse al margen de una determinada situación o acción. Propensión a la irritabilidad, cinismo e indignación. Las emociones asociadas son: culpabilidad, baja autoestima, frustración, ansiedad, e incluso agresividad.  

INDIVIDUALIDAD: Grado en el que la motivación personal está basada en factores subjetivos o la tendencia a razonar y ejercer de acuerdo con los criterios personales. Tratan de satisfacer sus deseos y metas propias antes que las de los demás. Para las personas individualistas prima la fortaleza, autosuficiencia e independencia.       

COLECTIVISTA: Grado en el que las personas priorizan el bienestar de los demás y buscan complacer las metas y objetivos de los otros. Otorgan gran importancia a las relaciones con los demás y el apoyo social es muy común. Los colectivistas tienden a ser altruistas, confiables y generosos. 

Procesamiento de la información

FLEXIBLE: Grado en el que la persona tiene tendencia a identificar y reconocer las cosas que no funcionan y tener la habilidad de reajustar la conducta, emociones, pensamientos y objetivos para adaptarse al entorno. Apertura mental o a la experiencia, disfrutan de los nuevos entornos.

RÍGIDO: Grado en el que se busca tener el control total de las cosas experimentando angustia cuando no se tienen. Las personas rígidas tienen dificultad para valorar y comprender distintos puntos de vista debido al arraigo de determinadas creencias o formas de pensar. Incapacidad para la adaptación a los cambios o nuevas situaciones, tendiendo a repetir las conductas que no funcionan sin buscar nuevas opciones. La rigidez mental genera una continua sensación de malestar, frustración e irritación.

RACIONAL: Grado en el que las actuaciones de una persona se guían por el pensamiento o capacidad para razonar y analizar y no se ven eclipsadas ni dominadas por la impulsividad y las emociones. Las personas racionales tienden a reconocer sus errores y aprenden de las experiencias.

EMOCIONAL: Grado en el que las actuaciones de una persona se guían por el pensamiento o capacidad para razonar y analizar y no se ven eclipsadas ni dominadas por la impulsividad y las emociones. Las personas racionales tienden a reconocer sus errores y aprenden de las experiencias.  

Modos de interacción

SEGURO: Tendencia a pensar y sentir que se es competente, sintiéndose confiados en su entorno, mostrando que es dueño de sí mismo, enérgico y decidido en las relaciones sociales. Su felicidad y bienestar depende de ellos mismos, no juzgan a los demás y escuchan y aceptan las críticas constructivas. Suelen ser personas proactivas y creativas que asumen riesgos y se comunican de forma abierta. No tienen miedo a equivocarse, se aceptan y reconocen a sí mismas.

INSEGURO: Tendencia a poseer un bajo nivel de confianza tanto en sí mismos como en los demás. Existe una ausencia de visión objetiva de sus habilidades. Suelen presentar un miedo irracional al fracaso y compararse de manera inconsciente con los demás. Tratan de ocultar sus inseguridades.

SOCIABLE: Grado en el que una persona está inclinada de forma innata al trato y relación con las personas y/o que disfruta de ello. No siente rechazo o bloqueo a compartir opiniones o sentimientos. Suelen ser personas positivas.

SOLITARIO: Tendencia a relacionarse con los demás sin mostrar las emociones. Suelen hacerlo de una manera distante, independiente, sin afecto, fría e indiferente. Priorizan estar sin compañía y disfrutan de ello. 

DOMINANTE: Tendencia al control, al poder y al estilo de comunicación agresivo. Se ven a sí mismas como personas valientes y competitivas. Suelen buscar el poder y les gusta mandar, poner normas y castigan la violación de estas. Persona confiable y fuerte. Suelen tener una buena autogestión emocional aunque esta tenga consecuencias negativas en los demás. 

SUMISO: Tendencia a someterse de forma voluntaria al poder y mando de los demás. Su objetivo es satisfacer a los demás y tienden a evitar el conflicto. Suelen ser personas tímidas, discretas y con un estilo de comunicación pasivo.